Nos destacamos como una empresa familiar comprometida con más de 30 años de experiencia en ofrecer un servicio de comida rápida excepcional.

 

 

 

La inspiradora historia de Franco, un inmigrante italiano y antiguo obrero de un viejo hotel, se convierte en un relato emblemático de perseverancia y éxito. A los 18 años, emprende un viaje que culmina en la realización de su sueño: ser dueño de su propio negocio. Adquiere un pequeño tráiler de comida rápida, transformándolo en un icono de la ciudad.

 

En la década de los 90, Franco introduce un concepto revolucionario en la avenida ‘Cecilio Acosta’: «La calle del hambre». Este lugar se convierte en la respuesta a los antojos de comida rápida, incluso en las horas más tardías. Su negocio, denominado FRANCO, se destaca por sus filas interminables de clientes, maravillados por la velocidad con la que se preparan las delicias culinarias.

 

Desde sus inicios, Franco imprime un carácter de «manejo familiar» a su negocio, una tradición que se convierte en la piedra angular de su éxito. Sus hijos, creciendo junto a él, comprenden la pasión de su padre por el negocio, los clientes y el equipo de trabajadores. Bajo la tutela de Franco, los empleados se convierten en parte esencial del negocio, sintiendo el afecto y la importancia de su contribución.

 

La fórmula del éxito de FRANCO se basa en la calidad de la materia prima, garantizando una comida saludable. El ambiente de camaradería, la alegría y la inigualable rapidez en el servicio posicionan a FRANCO entre los líderes del estilo de comida rápida. En la actualidad, FRANCO es un patrimonio en Maracaibo, y su lema, «si no has ido a FRANCO no has estado en Maracaibo», resuena como un testimonio del impacto duradero de este negocio en la comunidad.